El Covid-19 hace un año logró parar el mundo. Un año después el mundo sigue girando, pero ya nada es igual. Los hábitos de consumo han cambiado de forma radical y las empresas han tenido que adaptarse a estos cambios. Han llegado las rebajas en la era del Covid-19.
Qué son las rebajas y cómo las recordamos
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Cuando pensamos en rebajas lo primero que viene a nuestra mente son los descuentos. Si consultamos el diccionario de la Real Academia Española, en la tercera acepción del verbo rebajar encontramos: «Disminuir el precio de algo». El sector que siempre se ha nutrido de esta maravillosa palabra (si eres consumidor) es el sector textil.
Todos en nuestra mente tenemos una imagen muy precisa de las rebajas en el sector textil. Esas grandes aglomeraciones por conseguir una prenda e incluso ese folclore popular de las peleas por conseguir prendas. A todos nos gusta vestir bien, y las rebajas es una buena oportunidad.
La actual situación de la compra online
No hace falta decir que la actual situación de pandemia ha afectado muy negativamente al sector textil. Las ventas se han desplomado aproximadamente un 40%, y las restricciones de movilidad son un impedimento para moverse a la tienda física. Por ello, en este momento, las rebajas no solo son en la tienda física, sino que internet está tomando mucha importancia en estas rebajas.
La compra online ya se disparó durante el confinamiento. Pero ahora mismo, con las actuales restricciones en algunos lugares de España por el Covid-19, las rebajas del sector textil están siendo online.
Cómo deben afrontarlo las empresas
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Muchas tiendas del sector textil tienen que adaptarse a las normativas y recomendaciones contra el Covid-19. Estas normativas son la limitación de aforo así como los nuevos horarios de cierre de las tiendas. Por eso no es de extrañar que muchos compradores decidan realizar las compras de rebajas desde su casa, con la comodidad que eso supone.
También destacar que las empresas necesitan actualizarse para poder aguantar a flote en esta pandemia. Por eso, deben contar con buenos servicios de logística que permitan hacer llegar sus productos en las mejores condiciones, y en el menor tiempo posible a sus clientes. Seguro que fortalecer o ponerse al día habrá supuesto un coste adicional. Pero es un coste necesario para estos tiempos que vive el comercio.
Por último, la empresa debe tener una página web que sea interactiva a la hora de realizar el proceso de compra. Además deben anunciarse en otras páginas por medio de banners bien diseñados para conseguir ese tráfico a la página web, y así ofrecer sus productos. Esto es importante porque ahora el escaparate ya no está en las calles, sino en esa ventana que llamamos pantalla.
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